Hoy os traigo doble ración del gran Henry James, con dos historias muy distintas pero igual de apasionantes y recomendables. Dos nouvelle que en apenas poco más de cien páginas demuestran toda la maestría del autor y se disfruta muchísimo leyéndolas.
En la primera nuestra protagonista es Julia Bride, una joven muy popular en la sociedad neoyorquina que ve muy menguadas sus opciones de matrimonio tanto por los divorcios de su madre, como por sus propias relaciones pasadas.
Llegamos a la vida de Julia en un momento clave, cuando parece que su futuro se va a solucionar... pero sabemos que en aquellos momentos el asunto del matrimonio era mucho más que una opción vital voluntaria entre dos personas. Había muchos más aspectos que tener en cuenta y a Julia vuelven situaciones y personas de otro tiempo que no van a ponerle las cosas fáciles. Se choca de bruces con el relevante, y muchas veces casi imposible de superar, tema de la reputación.
Y es ahí donde James nos muestra un personaje que a mí me ha dado incluso ternura. Una mujer que no tiene muchas posibilidades, que busca favor por favor para poder prosperar y establecerse y en cambio se encuentra de alguna manera siendo el cazador cazado.
En este libro están muy bien retratado ese prejuicio, esa injusticia histórica que hacía que la mujer que debe ser perfecta y sin tacha, mientras que el hombre no tanto. Tendrían otras complicaciones, pero en ese sentido siempre estaba más a tiempo, tenía más salidas para reinventarse y optar por qué hacer con su vida; al contrario que ellas.
Por otro lado, es una historia que está narrada con el estilo más cuidado y florido de James, por eso hay que leer con mucha atención para no perder detalle y disfrutar de lo maravillosamente bien que escribe, cómo juega con las palabras y logra así transmitir tan bien los sentimientos del protagonista.
Mención especial merece la edición tan bonita que ha hecho dÉpoca editorial. ¡Es una preciosidad! Las páginas tienen un color sepia que evoca otras épocas, con adornos florales, ilustraciones... y esas portadas tan ains. Una edición vintage que hace que te imagines que tienes entre manos un libro de aquel momento. ¡No se puede pedir más!
Pero como nunca se tiene suficiente de Henry James, no podéis dejar escapar Los papeles de Aspern y viajar a la hermosa y misteriosa Venecia. Aquí tenemos trama literaria con un joven editor que está fascinado por la obra de Jeffrey Aspern y que descubre que su antigua musa, que vive en un palacio de la ciudad, atesora unas cartas del poeta. Ansioso por hacerse con ellas trama un plan para entrar como inquilino en la casa y lograr llegar hasta tan preciado material.
En manos de otro escritor este argumento podría tener algún que otro susto o un truco aquí o allá para darle ritmo a la trama, pero a Henry James no le hace falta. Él apuesta por recrear una ambientación que tiene todo el romanticismo y la decadencia de Venecia: un palacio maravilloso pero descuidado y medio ruinoso, una anciana súper regia y al mismo tiempo inquietante, su sobrina ajada por la dedicación a su tía, pero aún con anhelos... y un ambicioso protagonista.
Las páginas pasan y parece que no ocurre nada, pero no puedes dejar de sentirte atrapado por la relación que se crea entre los personajes, por cada rincón de la casa, por esos papeles que tanto parecen esconder que junto con su desaparecido autor son como un personaje más. Quieres saber que pasó entre Aspern y la anciana y qué ocurrirá entre todos ellos si finalmente pueden leer sus palabras.
Es una atmósfera pesada, llena de dobles sentidos y de intereses que te lleva hasta un final, ¡¡apoteósico!! Lo leí en un parque uno de aquellos días de calor y yo creo que se me escapó en voz alta un "¡¡hala!!". Con ese giro sí que no contaba.
De nuevo en este libro James hace un alarde de cómo describir estancias, sentimientos... Me maravillaba, por ejemplo, cuando hablaba del jardín, la primera vez que se ven... Y los diálogos son increíbles, hay momentos de choque de fuerzas auténticos porque cada uno de ellos tiene un carácter más o menos evidente que en determinadas ocasiones sale a la luz.
Admiro tantísimo a Henry James (creo que se me notó un poquito jijijiji) que nunca me canso de leer obras suyas, así que mientras yo voy a por la próximo aquí os dejo estas dos maravillas y si ya las habéis leído no dejéis de comentarme qué os han parecido.
Llegamos a la vida de Julia en un momento clave, cuando parece que su futuro se va a solucionar... pero sabemos que en aquellos momentos el asunto del matrimonio era mucho más que una opción vital voluntaria entre dos personas. Había muchos más aspectos que tener en cuenta y a Julia vuelven situaciones y personas de otro tiempo que no van a ponerle las cosas fáciles. Se choca de bruces con el relevante, y muchas veces casi imposible de superar, tema de la reputación.
Wilmer Dewing |
En este libro están muy bien retratado ese prejuicio, esa injusticia histórica que hacía que la mujer que debe ser perfecta y sin tacha, mientras que el hombre no tanto. Tendrían otras complicaciones, pero en ese sentido siempre estaba más a tiempo, tenía más salidas para reinventarse y optar por qué hacer con su vida; al contrario que ellas.
Por otro lado, es una historia que está narrada con el estilo más cuidado y florido de James, por eso hay que leer con mucha atención para no perder detalle y disfrutar de lo maravillosamente bien que escribe, cómo juega con las palabras y logra así transmitir tan bien los sentimientos del protagonista.
Mención especial merece la edición tan bonita que ha hecho dÉpoca editorial. ¡Es una preciosidad! Las páginas tienen un color sepia que evoca otras épocas, con adornos florales, ilustraciones... y esas portadas tan ains. Una edición vintage que hace que te imagines que tienes entre manos un libro de aquel momento. ¡No se puede pedir más!
Pero como nunca se tiene suficiente de Henry James, no podéis dejar escapar Los papeles de Aspern y viajar a la hermosa y misteriosa Venecia. Aquí tenemos trama literaria con un joven editor que está fascinado por la obra de Jeffrey Aspern y que descubre que su antigua musa, que vive en un palacio de la ciudad, atesora unas cartas del poeta. Ansioso por hacerse con ellas trama un plan para entrar como inquilino en la casa y lograr llegar hasta tan preciado material.
En manos de otro escritor este argumento podría tener algún que otro susto o un truco aquí o allá para darle ritmo a la trama, pero a Henry James no le hace falta. Él apuesta por recrear una ambientación que tiene todo el romanticismo y la decadencia de Venecia: un palacio maravilloso pero descuidado y medio ruinoso, una anciana súper regia y al mismo tiempo inquietante, su sobrina ajada por la dedicación a su tía, pero aún con anhelos... y un ambicioso protagonista.
Martín Rico |
Es una atmósfera pesada, llena de dobles sentidos y de intereses que te lleva hasta un final, ¡¡apoteósico!! Lo leí en un parque uno de aquellos días de calor y yo creo que se me escapó en voz alta un "¡¡hala!!". Con ese giro sí que no contaba.
De nuevo en este libro James hace un alarde de cómo describir estancias, sentimientos... Me maravillaba, por ejemplo, cuando hablaba del jardín, la primera vez que se ven... Y los diálogos son increíbles, hay momentos de choque de fuerzas auténticos porque cada uno de ellos tiene un carácter más o menos evidente que en determinadas ocasiones sale a la luz.
Admiro tantísimo a Henry James (creo que se me notó un poquito jijijiji) que nunca me canso de leer obras suyas, así que mientras yo voy a por la próximo aquí os dejo estas dos maravillas y si ya las habéis leído no dejéis de comentarme qué os han parecido.
Martín Rico |